sábado, 16 de mayo de 2009

La muerte



Llegará el día en que tiendas tú mano,
te estaré esperando,
mientras tanto terminaré lo empezado,
y no dejaré cosas sin acabar, sin hacer,
para sentirme llena cuando llegues,
y me des tú bienvenida, y mi triste ida.

Se oirán las campanas a lo lejos,
y nacerán tantas flores ese día,
y tantas otras las llevaré conmigo.

Llegará el día en que me felicites,
y en que te felicite por haber llegado,
y nos estrecharemos las manos tan fuertemente,
que nadie podrá separarnos,

y dejarás a tantos para estar conmigo,
y cuidarme que sentiré como mi alma me abandona,
para entregarse como agradecimiento tomarás mi alma,
y la llevarás hacia el vacío, un vacío repleto
de tantas cosas que irán quedando atrás.

Llegará el día en que me mires a los ojos,
yo sentiré tu presencia,
y sabré que ha terminado todo,
y que por fin te hallé.

Se oirán las risas a lo lejos,
y los llantos, y los nacimientos,
pero me llevarás contigo y poco a poco todo se ira apagando,
cumplirás tu promesa,
después de tanto y tan poco tiempo,

pero aún así sabrás que te estaré esperando,
firme en el camino, hasta encontrarte,
o hasta que tú me encuentres,
y volemos lejos de aquí,
dulce amiga.

Meiko 2000

0 comentarios: