Ayer mirando las estrellas
recordé viejos tiempos,
en los que valía la pena
luchar por ese hueco vacío ahora,
miré como los árboles sembrados
cuidaban las flores del suelo,
miré como la luna cercana a las estrellas
las guarda y las ampara.
Hubo un tiempo en que me sentí amparada,
hubo un momento en que me sentí
como aquellas flores,
y la brisa fría de la noche me hizo mirar atrás.
El tiempo pasaba despacio
y los recuerdos turbaban mi mente
pero todo había cambiado,
en ese momento pensé que la amistad en mi vida
tal vez había existido.
En ese instante comprendí,
la amistad existe,
sólo las personas sabemos regarla
pero no lo hacemos,
dentro de unos años esas flores se habrán secado.
La amistad es como las estrellas,
la luna las cuida y las alimenta,
peor a veces la luna no está allí
y la noche permanece fría, triste ...
Aquella noche recordé
que algún tiempo hubiera sido estrella,
claro que a todo el mundo le gustaría serlo
pero algunas veces se destruyen,
quizás no encontré la luna adecuada ...
En otro tiempo espero que esos árboles
protejan a otras flores
y que las flores adornen a los árboles
y que todo resplandezca,
en otro tiempo espero,
que la noche se ilumine
y que los hombres hayan cambiado
y que no destruyan como lo hacemos,
en otro tiempo espero encontrar
árboles a los que pueda ardornar ...
en otro tiempo espero saber
lo que es la verdadera amistad,
aunque espero que no sea demasiado
tarde para conocerla.
MEIKO 1996
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