sábado, 12 de marzo de 2011

Doble yo



Escuché tu voz,
sentí tu voz por primera vez,
el tiempo se detuvo,
y en un sólo instante ya había cambiado todo,

estabas triste,
pero estábamos las dos frente a frente,
recorrí tantos valles y tantas montañas,
busqué en los caminos y en los ríos que encontraba,
recorrí las nubes, el sol, el cielo,
y la tristeza fue colmando mi esperanza,
escuché tu voz,
estabas tan cerca de mí,
y tan lejos te encontrabas,

recorrí los sueños, los secretos,
las mentiras, los deseos, y todos los hallé muertos,
fue sólo el instante en el que te vi a lo lejos
reflejada en mis ojos tan nublados, tan muertos,
tan distintos, tan secos, y a la vez tan vivos,

el reloj pasa lento,y la vida se pierde,
y los sueños se duermen, y se apaga el recuerdo,
y se sienten los versos.
Escuché tu voz,
sentí tu voz por primera vez,
sentí el frío y el calor despierto,
y rompí aquel silencio vació que inundaba mi alma,
con mi dulce sonrisa,
tantos caminos, tantos juegos,
tantos llantos, tantos recuerdos,
que se van acumulando después de tanto,
y las horas se van, se pierden y vuelven,

nuevas horas, nuevos días,
nuevo es el calor y el frío
que en las noches atrapan mi pecho,
nuevo es el dolor y el llanto,
que en los días bailan en mi alma,
nuevas son las lágrimas que abrigan el
frío de mis párpados,
y nueva es la dulce voz que escucho
en las mañanas y en las noches
al pasar un día más, la dulce voz de mi alma.

Meiko

El trágico reloj de la vida



El reloj del tiempo,

el mágico reloj de la vida,
pasa despacio y deprisa,
pero no vuelve,

la vida se va y no espera,
marcha a lo lejos,
lleva el equipaje de los sueños,
para depositarlos en el valle del recuerdo,
tan nublado y tan perdido,

la vida se va, no espera,
marcha a lo lejos,
ilusiones marchitadas y repletas de llanto,
cartas que vuelan a lo lejos
en las que las direcciones se pierden en el tiempo,
y van a parar a múltiples paradas del pasado,
un pasado en el que algunos esperan llegar sus cartas,
y duermen en silencio y recorren múltiples paradas
pero los trenes se van y no esperan,

la vida se va y no espera,
marcha a lo lejos,
y tanto queda atrás,
quizás peor pero mejor visto desde tan lejos
y tan cerca al mismo tiempo,

el mágico reloj de la vida,

tan indistinto para todos,

pero en el fondo tan igual,
te arrastra en silencio,
todo llega, acaba y sigue su camino,
un camino que arrastra,
que te arrastra o te deja,
aunque en el fondo te va llevando,
al dulce y amargo manantial soñado.

Meiko

Una declaración de amor




Ayer mi alma se impregnó de ti,
de tus silencios tan sonoros,
de la intensidad de tu llanto
y de esa fogosidad en tu mirada que te iluminaba.

Ayer tus ojos impregnaban mi alma,
mezcla ardiente de placer y dolor,
que derretían los pedazos vacíos de mi existencia
y sucumbían las paredes de mi mente colapsando mis recuerdos
y nublando mi propio pensamiento paralizando imágenes en mi alma
que no emitían nada más que fragmentos de ti.

¿Cómo amarte si no tengo suficientemente alma para sentirte,
si tus besos absorbieron la esencia de mis lágrimas,
si tus ojos destruyeron el fuego de mi mirada,
si no me encuentro a mi mismo dentro de mi propio cuerpo?

¿Cómo quererte si tu cariño el mío ha destruido,
si permanezco mudo desde que te clavaste en mi garganta,
si tus caricias invalidaron mis músculos,
si tus llantos ahogaron mis lágrimas?

¿Cómo mirarte si nublaste mi existencia,
si permanezco ciego desde la intensidad de tu mirada,
si mis ojos tienen miedo de sentir tu realidad,
si tu mirada se clavó en mi alma?

Hoy mi alma se impregna de ti,
de tus palabras tan silenciosas,
de la decrepitud en tu sonrisa
y del oscurecimiento de esa mirada que te va destruyendo.

Hoy tus ojos vacían mi alma,
mezcla calmada de dolor y placer,
que llenan los pedazos incompletos de mi existencia y sosiegan las paredes de mi mente despertando mis recuerdos,
coloreando mi propio pensamiento, moviendo las imágenes de mi alma que emiten los fragmentos de nosotros.

Ahora te amo,
porque mi alma es lo suficientemente grande para sentirte,
porque mis besos absorben la esencia de tus lágrimas,
porque mis lágrimas secan el fuego de tu mirada
y porque me hallo yo mismo dentro de tu propio cuerpo.

Ahora te quiero,
porque mi cariño renace en ti,
porque mis palabras de amor curan mi garganta,
porque mis caricias agilizan mis músculos
y porque mis llantos ahogan tus lágrimas.

Ahora te miro,
porque coloreo tu existencia,
porque la oscuridad de tu mirada cura mis ojos,
porque tus valientes ojos me sienten
y porque mi mirada se está sembrando en tu alma.

Mañana mi alma y la tuya serán una sola,
nuestras palabras serán ruidos silenciosos
y nuestras sonrisas serán intensas y decrépitas
mientras tu mirada se tornará fogosa y al mismo tiempo oscura.

Mañana nuestros ojos serán la guía de nuestra alma,
mezcla ardiente de tu placer y calmante de mi dolor,
vaciarán y llenarán los huecos de nuestra existencia
reestructurando las paredes de nuestra mente
y sintiendo nuestros recuerdos vivirán nuestro pensamiento
proyectando así nuestros fragmentos.

¿Cómo te amaré si mi alma estará junto a ti,
si nuestros besos besarán nuestras lágrimas,
si nuestras lágrimas se evaporarán por el fuego,
si nuestros cuerpos se hallarán en un sólo cuerpo?

¿Cómo te querré, si seremos sólo cariño,
si nuestras palabras habrán creado un nuevo lenguaje,
si nuestras caricias serán los movimientos de nuestros músculos,
si nuestras lágrimas sembrarán nuestros llantos?

¿Cómo te veré si habremos saturado nuestra existencia,
si nuestros ojos estarán ciegos de amor
porque habrán sentido nuestra propia realidad
a través de la mirada que habrá creado nuestra alma?

Así, me declaré a ti,
aun así me declaro a ti, sin respuestas,
y proseguiré mi declaración eterna de esta misma manera,
sin respuestas.
Meiko